Ha
llegado Junio, y con él un nuevo fin de curso más en la ya larga
trayectoria del Aula.
Las
clases se quedan vacías, los pasillos silenciosos, esperando a que
llegue Octubre y volvamos a ocuparlos e iniciemos una nueva andadura.
Viene ahora un periodo de clama y
reflexión, momento que aprovecharemos para descansar y preparar los
proyectos para el nuevo curso, los que han quedado pendientes y
seguramente otros nuevos que surgirán por el camino.
Casi
siempre, al final de curso, tenemos sentimientos contradictorios. Por
un lado, estamos felices por acabar, (el calor influye un poquito), y
sin embargo tristes, al ver que vamos a dejar de ver a amigos y
compañeros, monitoras y monitores.
Estos últimos descansarán,
porque el curso ha sido largo y la preparación de las clases les
lleva tiempo de trabajo y dedicación, pero saben que todos les
agradecemos su esfuerzo, gracias a todos.
A
todos nos queda ahora la satisfacción del deber cumplido, del
compromiso mutuo y la alegría de ENSEÑAR Y APRENDER.
Junio
2.012
Inés
Gracias a tí Inés por la reflexión tan bonita y acertada que has hecho.
ResponderEliminarSabes que te queremos un montón, y que mejor demostración, si no agradeciendote tu valiosa participación, tanto como presidenta como por tus aportaciones en el blog.
Un abrazo. ¡Felices vacaciones!
Africa.